¿Quieres disfrutar de tu jardín también durante el invierno? El margaritero gris o margarita amarilla (Euryops pectinatus) es una planta muy utilizada en jardinería por su prolongada floración. Puedes aprovechar sus coquetas flores para dar un toque de color a esos meses habitualmente tristes. Ésta es mi propuesta de hoy, no te la pierdas.

Aunque su época preferida sea la primavera, así se ve ahora, a finales de otoño, el Euryops. Con el invierno “a la vuelta de la esquina” sigue ofreciendo una prodiga floración ¿no te parece? Esta fabulosa planta te dará flores prácticamente durante todo el año, a excepción del verano.

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Descripción

La margarita amarilla (Euryops pectinatus) es una planta arbustiva, de porte redondeado y hojas perennes que llega a alcanzar el metro y medio de altura. Pertenece a la familia de las asteráceas, igual que el girasol y otras especies de flores compuestas.

Como curiosidad… la margarita del Euryops no es en realidad una flor sino muchas. Lo que parece el botón central de la misma está formado por incontables capítulos florales y sus pétalos amarillos -entre once y quince- son brácteas (hojas modificadas).Las hojas, para colmo, también son cuanto menos peculiares. Presentan unos lóbulos extremadamente marcados, que otorgan un aspecto semejante a las costillas. Con el tiempo, además, su verde intenso en los nuevos brotes va palideciendo, adquiriendo un tono más grisáceo. Por ende también se le conoce como margaritero gris.

Usos del Euryops

El Euryops adora el sol, por lo tanto deberás reservarle un emplazamiento bien iluminado. No lo sitúes nunca en el interior de tu vivienda. Da igual si lo colocas en el jardín o en una maceta -se sentirá cómodo igualmente-, pero ten siempre en cuenta esto: cuanta más luz reciba, más florecerá.

Su generosidad en cuanto a flores la hacen candidata a ocupar los puestos protagonistas de tu jardín. Con estas margaritas puedes engalanar accesos o enmarcar zonas de paso. ¡Tú decides dónde! Es una planta que no te fallará.

Cuidados

La margarita amarilla (Euryops pectinatus) es un arbusto acostumbrado al clima mediterráneo, no en balde procede de una parte de Sudáfrica con condiciones muy parecidas. Es perfecta por lo tanto para jardines templados. Aguanta las heladas siempre que no sean excesivas (hasta los -5ºC).

Exposición

Esta planta es ideal para los neófitos, pues es muy fácil de cultivar. A ser posible búscale un lugar soleado, eso sí. Tendrá menos riesgo de padecer oídio -una de sus pocas debilidades- y su floración será todavía más generosa.

Riego

El riego no suele ser un problema con el Euryops. Aguanta la sequía, aunque prefiere la hidratación constante para mantener su floración. Si lo tienes en maceta, durante la primavera y el otoño una vez a la semana será suficiente. Dobla su riego en verano. Llegado el invierno, éste tal vez deje de ser necesario.

Ya lo sabes, para asegurarte lo mejor es tantear la humedad de la tierra. Amplía la información en 5 errores que no debes cometer al regar las plantas.

Sustrato

Sea como sea, la aportación de agua entre otras muchas cosas deberá estar relacionada con el tipo de sustrato. A la margarita amarilla le gusta que sea ligero, para facilitar el drenaje. Si quieres jugar sobre seguro, una mezcla de sustrato universal con algo de arena o perlita será lo más adecuado. No soporta el encharcamiento. Así que actúa en consecuencia.

Abonado

El Euryops no es caprichoso en cuanto a nutrientes, aunque para disparar la floración, además de luz y de agua le irá genial algo de abono. Elige uno especial para plantas de flor. Independientemente de su presentación ha de ser siempre bajo en nitrógeno.

Si seguimos hablando de macetas, el abono líquido será la mejor opción (lo encontrarás en Amazon gracias a este enlace). Añádelo al agua de riego aproximadamente cada tres semanas. Para aquellas plantadas en el jardín es mejor utilizar abono granulado de liberación lenta (en este caso cada tres meses).

Poda

Las matas de Euryops con el tiempo envejecen y quedan peladas en su base. Para rejuvenecerlas, pódalas drásticamente (unos dos tercios tal vez). No tengas miedo, volverán a brotar sin problemas.

Aunque ya de por si estos arbustos presentan un aspecto compacto, los puedes ayudar con un repaso para conservar su forma. Corta periódicamente puntas o ramas enfermas. Como ves, admiten muy bien la poda. Más consejos de poda de plantas aquí.

Plagas

Ya ha quedado claro que la de hoy es una planta muy resistente. Así que con las plagas no será una excepción. Tendrás que vigilar sin embargo con el oídio, en circunstancias de humedad elevada o ubicada a la sombra.

El pulgón también podría aparecer a partir de primavera y hasta el otoño. Si fuera así, no pasa nada, el jabón potásico te ayudará a eliminarlo de forma respetuosa con el medio ambiente.

La margarita amarilla (Euryops pectinatus) dará vida a tu jardín durante prácticamente todo el año. Será una garantía para el que desee a la par belleza y resistencia en una planta. Si tienes un jardín o terraza con buena luz y donde las heladas no son un inconveniente -digamos por ejemplo en la costa mediterránea-, ni lo pienses. ¡Hazte ya con esta planta!